Square Ventures llega a un acuerdo para incorporar la tecnología blockchain en sus proyectos, por eso de ahora en adelante (julio 2020) todos los árboles que plantemos en Plántalo tendrán una certificación en base a esta tecnología.
En el artículo de Mydoor sobre el Blockchain: “Blockchain para el tercer sector: transparencia de principio a fin” describen la tecnología y su uso:
Blockchain, literalmente «cadena de bloques«, es una estructura de datos compartida e inmutable.
Funciona como un «registro digital» en el que determinados usuarios (llamados «Mainer») resuelven, gracias a una gran potencia computacional, un complejo problema matemático y, de esta manera, añaden en el orden correcto una transacción a una secuencia anterior de transacciones. Este grupo de transacciones constituye un «bloque» y un grupo de bloques crea una «cadena». Puesto que cada bloque depende de los anteriores y lleva una huella de estos, es imposible que sea modificado o eliminado. Por esta razón, una Blockchain es inmutable en el tiempo y supone un sistema ideal para garantizar la transparencia en los procesos de donación. La base de su tecnología es la puesta en común de un registro (como un libro de contabilidad) que permite que cada usuario, ligado a la red, posea una copia de todas las transacciones. Por lo tanto, una Blockchain es como un libro de contabilidad «compartido». Aunque suele ser considerada una base de datos, es mucho más que eso.
En principio, ha sido utilizada para el intercambio de cripto-monedas, como el Bitcoin, pero ha evolucionado a otros usos diferentes, interesando a sectores no sólo financieros. Por ejemplo, la tecnología Ethereum habilita la ejecución en casos de uso peer-to-peer y otras aplicaciones distribuidas, donde es fundamental la transparencia y la inmutabilidad del dato y, a través de «smart contracts», puede imponer una condición o automatizar y certificar un proceso y puede interactuar de manera segura con el mundo externo.